Más vacunas y fármacos contra la COVID-19, Palestina, sanciones… las noticias del miércoles
La Organización Panamericana de la Salud abre la puerta a millones de vacunas contra la COVID-19 en América Latina y el Caribe. La Organización Mundial de la Salud examinará tres nuevos fármacos contra el COVID-19 en pacientes hospitalizados. América Latina tiene que adaptarse ante el alza de los precios de los productos básicos. Piden a Israel que proteja a los defensores de los derechos humanos en los Territorios Palestinos Ocupados. Las sanciones unilaterales vulneran el derecho al desarrollo, aseguran expertos en derechos humanos.
La OPS abre la puerta a más vacunas contra la COVID-19 para América Latina y el Caribe
La Organización Panamericana de la Salud anunció hoy una nueva posibilidad para acceder a millones de vacunas contra la COVID-19, a través de su Fondo Rotatorio.
La directora de la Organización anunció que el Fondo está recibiendo solicitudes de los países de la región para las vacunas contra la COVID-19 correspondientes a los últimos tres meses de 2021 y para el año 2022.
Carissa Etienne indicó que, hasta el momento, más de 20 países expresado formalmente su interés y que ese número “crece a diario”.
La nueva iniciativa pondrá en circulación decenas de millones de dosis de vacunas COVID-19 que se sumarán a las que ofrece el mecanismo COVAX, que cubre al 20% de la población de cada país, y complementará los acuerdos bilaterales y otras vías existentes para que los países tengan acceso a las inmunizaciones.
La OMS probará tres nuevos fármacos contra el COVID-19 en pacientes hospitalizados
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud anunció que probará tres nuevos fármacos en pacientes hospitalizados de COVID-19, como parte de su ensayo Solidarity Plus.
Un grupo de expertos independientes se encargó de la elección de las medicinas que destacan por su potencial para reducir el riesgo de muerte en pacientes ingresados por COVID-19.
Los medicamentos ya se utilizaban previamente para otros tratamientos. El artesunato se usa para la malaria grave, el imatinib para ciertos tipos de cánceres y el infliximab para enfermedades del sistema inmunitario como la enfermedad de Crohn y la artritis reumatoide.
Las empresas farmacéuticas que fabrican estas medicinas las donaron para el ensayo clínico. El estudio evaluó previamente cuatro medicamentos el remdesivir, la hidroxicloroquina, el lopinavir y el interferón y determinó que tenían poco o ningún efecto en los pacientes hospitalizados con COVID-19.
Alza de precios de los productos básicos en America Latina: Hay que incrementar la capacidad de adaptación de las economías
Tras la reciente alza de los precios de los productos básicos en América Latina y el Caribe, un nuevo informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo urge a las economías de la región a aumentar su resiliencia ante los “shocks” externos.
El estudio destaca que las diferencias estructurales regionales probablemente provocarán impactos dispares del aumento de los precios de los productos básicos en el comercio y el crecimiento del PIB de los países en desarrollo que dependen de este tipo de mercancías
Añade que el elevado nivel de incertidumbre en los mercados de productos básicos y el alto grado de dependencia de este tipo de mercancías en toda la región ponen de manifiesto la necesidad de aumentar la capacidad de adaptación y resistencia de las economías de América Latina ante futuras crisis.
Según el informe, los efectos del aumento de los precios de los productos básicos en la región se ven agravados por las diferencias en el endeudamiento público, el entorno de las políticas nacionales y otros factores sociopolíticos y económicos que repercuten en las variables macroeconómicas.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo recuerda que 14 de los 33 países de la región dependen de los productos básicos, lo que significa que éstos representan el 60% o más de sus ingresos totales por exportación de mercancías.
Experta de la ONU pide a Israel que proteja a los defensores de los derechos humanos en el Territorio Palestino Ocupado
Israel debe proteger a los defensores de los derechos humanos en el Territorio Palestino Ocupado y dentro de sus fronteras destacó hoy una experta de la ONU.
La relatora especial sobre la situación de los defensores de los derechos humanos expresó su preocupación por las detenciones, el acoso, la criminalización y las amenazas contra los defensores de las garantías fundamentales en el Territorio Palestino Ocupado y en Israel, y ha pedido a este país que garantice su seguridad.
Mary Lawlor aseguró que «las detenciones y las redadas en los hogares de los defensores de los derechos humanos palestinos forman parte de una campaña más extensa contra quienes defienden los derechos humanos de los palestinos en los Territorios Palestinos Ocupados».
Entre otros casos, Lawlor manifestó su preocupación por la detención arbitraria del activista Farid Al-Atrash, que fue detenido por las fuerzas militares israelíes tras participar pacíficamente en una manifestación en Belén el 15 de junio, y puesto en libertad bajo fianza ocho días después.
Las sanciones unilaterales vulneran el derecho al desarrollo
Un grupo de relatores y expertos independientes de la ONU pidieron a los países que imponen sanciones unilaterales que las retiren o al menos las reduzcan al mínimo para garantizar que no se vean afectados el Estado de derecho y los derechos humanos, incluido el derecho al desarrollo.
Los expertos independientes designados por el Consejo de Derechos Humanos instaron a los Estados a aplicar el “principio de precaución” cuando adopten sanciones unilaterales «para evitar cualquier impacto humanitario negativo en todo el ámbito de los derechos humanos, incluido el derecho al desarrollo»,
Los especialistas destacaron la necesidad de acabar con un castigo que penaliza a los civiles inocentes y recordaron que la Asamblea General de la ONU declaró “que el derecho al desarrollo es un derecho humano inalienable».
También señalaron que los países objeto de sanciones, como Venezuela, Cuba, Siria e Irán, se hunden en la pobreza porque no pueden obtener servicios esenciales como medicamentos, alimentos, electricidad, agua y combustible.
